Parroquia de San Pedro apóstol mártir, Chenalhó, Chiapas, México
1 de julio de 2016
A las organizaciones sociales y políticas
A los defensores de derechos humanos nacional e internacional
A la prensa nacional e internacional
A los medios de comunicación alternativos o como se llamen
A la opinión pública
A las Diócesis de San Cristóbal
Al Pueblo Creyente en General
A los padres de familia y alumnos consientes
A los Gobiernos Estatal y Federal
Hermanos y hermanas
Nosotros El pueblo Creyente y los jóvenes de la parroquia San Pedro Apóstol Mártir, del Mpio. De Chenalhó, nos solidarizamos con los maestros, doctores, alumnos y padres de familia conscientes en pie de lucha que se encuentran en el plantón en Tuxtla Gutiérrez.
Hoy venimos cargados con la fuerza de nuestra solidaridad porque nuestra iglesia es samaritana y seguirá siendo, samaritana mientras nos duela el sufrimiento de nuestros hermanos, no podemos cruzarnos de brazos viendo la violencia convertida en la política del estado. No podemos callar tanta injusticia, corrupción, violaciones de los derechos humanos que vemos y/o que oímos y que vivimos cada día.
Como nos ha recordado el PAPA Francisco, “Nuestra de es revolucionaria”, no basta rezar tenemos que organizar y lucha para defender nuestra patria, como creyentes tenemos que vencer el miedo.
Este sistema político de nuestro país México está podrido y “no se aguanta mas, no lo aguantan los campesinos, los obreros, las comunidades, los pueblos” Papa Francisco les recordamos al gobierno que asì estaban viviendo nuestros abuelos en tiempos de la dictadura de Don Porfrio Dìas, porque las respuestas a las necesidades del pueblo son la represión y mas leyes, pero los que gobiernan no las cumplen, como dijo Jesús a los Fariseos
“Pobres de ustedes también Maestros de la Ley que imponen a los hombres cargas insoportables y ni siquiera mueven un dedo para ayudarlos a que los lleven” Lc 12, 46
Pero nosotros sabemos que Dios esta del lado del que sufre como dice en la biblia.
“Ay de Ustedes que transforman las leyes en algo amargo y tiran por el suelo la justicia, odian al que defiende lo justo y aborrecen al que dice la verdad” Am., 10
Quieren tener al pueblo con las manos atadas, con los ojos cerrados sin consultar sus acuerdos, por eso el pueblo exigimos cambios verdaderos.